En la competencia había otros 13 candidatos igual de valerosos.
Un gatito blanco llamado Theo, acaba de ser coronado Gato Británico del Año y está amenazando con robar la popularidad de la Duquesa de Sussex, Megan Markle.
¿Pero qué hizo para recibir tal condecoración? Nada más y nada menos que salvarle la vida a su dueña.
Cuando la mujer sufrió una trombosis, Theo le dio golpes con la patita y se sentó en su cara evitando que se durmiera.
Luego de superar a cientos de otros valientes felinos, Theo se quedó con el principal galardón en la ceremonia anual, realizada en el Hotel Savoy, de Londres, donde su dueña, Charlotte Dixon, recibió el premio en su representación ya que él murió hace algunos días.
“El paramédico dijo que pensaba que yo tenía una trombosis y que era bueno que no hubiera podido dormir porque probablemente ya no habría despertado”, contó Dixon, que a su vez, cuidó a Theo desde que era pequeño y lo ayudó a recuperarse de una grave enfermedad.
Entre los felinos destacados estuvieron también Arthur, que ayudó a su dueña a superar sus problemas de salud metal, y Toby de dos años que alerta a su humana cuando está a punto de sufrir convulsiones.